En ocasiones, los proyectos de viviendas de obra nueva se centran en la volumetría, la definición de la estructura o las fachadas (algo básico a lo que, por supuesto, hay que dedicarle toda la atención), pero se olvidan, en mayor o menor medida, de lo que ocurre dentro. Y es que una casa es la suma inseparable de ambos: un exterior y un interior -bien vestido-.
Como decimos en Dmasc Arquitectos, tan importante es un forjado bien dimensionado como un acabado interior bien escogido. Ambos son necesarios en una vivienda porque cada uno cumple su función.
Un proyecto de interiorismo, a diferencia de lo que normalmente se cree, no es lo mismo que un proyecto de decoración. En él se define desde la distribución interior hasta los materiales, la carpintería a medida (tanto metálica como de madera) o las instalaciones, mientras que la decoración hace referencia a todos los muebles y objetos decorativos (como arte o textiles).
Desde Dmasc Arquitectos creemos que te puede resultar útil conocer y descubrir en qué consiste un proyecto de interiorismo para una vivienda de obra nueva y qué claves hay que tener en cuenta.
Índice de contenido
6 claves a tener en cuenta en un proyecto de interiorismo de obra nueva
1. Distribución óptima del mobiliario en planta
Puede parecer una tontería, pero es fundamental estudiar la mejor disposición del mobiliario desde el principio, porque de ello van a depender muchas otras decisiones como por ejemplo la iluminación, la posición de los enchufes o incluso la apertura de las puertas de paso.
Definiendo desde el inicio del proyecto la posición de las piezas de mobiliario (al menos de las más voluminosas, como sofás, camas o mesas de comedor, aunque lo ideal es que esté todo), el resultado final será mucho más fluido y coherente en su totalidad.
Es imprescindible tener muy presente que la distribución del mobiliario va de la mano del diseño de la iluminación, porque es prácticamente imposible estudiar uno sin el otro.
2. Definición de acabados: suelos y paredes
¿Tu proyecto de interiorismo de obra nueva incluye la definición de suelos y revestimientos verticales? La mejor manera de abordarlos es pensando en ellos de forma global, de manera que todos los materiales de la vivienda transmitan las mismas sensaciones y hablen el mismo lenguaje, en lugar de estudiar cada estancia de manera individual.
3. Estudio de la iluminación y la electricidad
Un buen diseño de iluminación en una vivienda es básico y depende, casi al 100%, de la distribución del mobiliario (exactamente igual que la posición de los enchufes o las tomas de datos o televisión).
No obstante, en algunos proyectos de obra nueva esto no se define: o bien se deja al criterio del cliente, o bien se incluye de forma genérica (por ejemplo, una única toma central en el techo de cada estancia), de manera que se desaprovecha al completo el gran potencial e impacto que puede tener una buena iluminación en una vivienda.
Cada situación requiere una iluminación específica. No es lo mismo la luz de lectura de una mesilla de noche que la luz de trabajo de una cocina o una iluminación de acento para un cuadro.
Pensar en todas esas pequeñas escenas suma y añade interés y comodidad en el día a día a la vivienda y, desde luego, estamos seguros de que merece toda nuestra atención. Sin duda alguna, en el resultado final se nota la diferencia.
4. Elección de sanitarios, griferías y complementos
Los sanitarios, griferías y complementos forman parte del ecosistema de la vivienda, casi en la misma medida que los pavimentos o los revestimientos. Pueden ayudarte tanto a conseguir puntos de acento como a crear una estética perfectamente limpia y homogénea. Y pensar en ellos en global, te puede ayudar a cargar de sentido el interior de tu hogar.
En definitiva, los sanitarios, las griferías, los tiradores de los muebles, los radiadores o las manillas de las puertas, forman parte de un grupo muy amplio de elementos que pueden modificar o interferir sustancialmente en cómo se percibe y se utiliza un interior. Por ello, en un proyecto de interiorismo, siempre deben estudiarse y definirse para que tengan sentido no solo entre ellos sino con los demás elementos del proyecto.
5. Diseño de la cocina y otros muebles a medida
El diseño de la cocina y de otros muebles a medida (puertas de paso, armarios, estanterías, escritorios, bancos, etc.) constituye un proyecto en sí mismo dentro del proyecto de interiorismo, que responde no solo a unas necesidades específicas (tanto de uso como de espacio), sino también a una estética.
Pues una vivienda nunca está vestida del todo hasta que no se acaba de instalar la carpintería de madera. Esta añade el empujón final: una última capa de textura, detalle y uso que transforma al completo cualquier interior.
Con el proyecto de carpintería (que suele ser extenso y de gran detalle) se termina de definir el aspecto final de una casa, por lo que sus materiales deben pensarse a la vez que los demás acabados y complementos. De esta manera, el interior de la vivienda se percibe como un todo: cada elemento tiene sentido por sí solo, pero también por su relación con los demás.
6. Proyecto de decoración
Un proyecto de interiorismo no tiene por qué incluir un proyecto de decoración, pues la elección de los modelos concretos de muebles no es estrictamente necesaria para el desarrollo de los interiores de una casa, pero si buscas que todo guarde una estética común y te preocupa la decoración, siempre puedes valorarlo como un extra.
A lo largo de este artículo puede que te hayas preguntado cuándo tiene sentido pensar en si necesitas o no un proyecto de interiorismo para una vivienda de obra nueva. Como recomendación podemos decir que, cuanto más avanzados estén los trabajos, menos flexibilidad tendrás para trabajar en el interiorismo.
Esperamos que este artículo te haya sido de utilidad para comprender los aspectos claves de un proyecto de interiorismo para una casa de obra nueva. Si tienes alguna duda, desde Dmasc Arquitectos te ayudamos en todo lo que necesites.