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Acristalamiento de terraza

Acristalar una terraza en Madrid: cómo se hace y cuándo hacerlo

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El cerramiento de una terraza es la forma más sencilla de ganar metros en casa y poder usar el espacio durante todas las épocas del año.

Entre todas las opciones que existen para el cerramiento, una de las favoritas y una tendencia de lo más actual es elegir el acristalamiento para este espacio, lo que nos dará mucha luz al espacio.

Hoy desde DmasC Arquitectos hablaremos de esta opción, de toda la normativa necesaria para ello y las ventajas que nos reportará. Sigue leyendo y toma nota.

Qué normativas debes cumplir para acristalar tu terraza

Una de las cuestiones que mayores enfrentamientos provoca alrededor de esta cuestión es la normativa establecida por los estatutos de la comunidad de vecinos. En ellos figura si está permitido el cerramiento de terrazas y de qué tipos. En el caso de que estén permitidos, deberemos informar al presidente de la fecha en la que las obras empezarán.

Por otro lado, también es importante revisar los registros de otros vecinos que cerraron y que no encontraron ningún problema, en el caso de que existan. Así nos aseguraremos de que no tengamos ningún problema a la hora de realizar esta reforma.

Es importante también tener en cuenta si el cerramiento influirá en la fachada. Si no lo hacen, en principio no necesitaremos una licencia para ello, pero si la reforma afecta a la fachada o la configuración del edificio sí que la necesitaremos. 

Una vez que hemos comprobado estás cuestiones, es el momento de ponerlo de manifiesto con el resto de propietarios. Apelando al artículo 10.3 de la Ley de Propiedad Horizontal, para garantizar la legalidad de tu terraza, deberemos contar la aprobación de las 3/5 partes de las cuotas de participación en la junta de propietarios en las que se exponga el asunto. En el supuesto caso de que los propietarios que no asistan a la junta se opongan a esta reforma, tendrán un total de 30 días para exponer su oposición.

Finalmente, en cuanto a la legalidad de este cerramiento, entra en juego el Ayuntamiento, quién tendrá sus propios requisitos para que esto se lleve a cabo. En el caso concreto de Madrid hay dos cuestiones claras a tener en cuenta para este tipo de reformas:

  • Los áticos no se pueden acristalar.
  • Aquellas terrazas que no estén actualmente cubiertas tampoco podrán acristalarse.

El resto de trámites que deberemos realizar con el Ayuntamiento es pedir la licencia que necesitamos para poner en marcha la reforma.

Proceso para cerrar una terraza de forma legal

Una vez tenemos claro todos los agentes legales que entran en juego durante esta reforma, estos son los 3 pasos a dar para poner en marcha el acristalamiento:

  1. Proyecto de cerramiento de terraza: Es el documento que acredita el diseño y los materiales que se usarán. Será imprescindible para que el Ayuntamiento dé su visto bueno.
  2. Permiso de la comunidad de vecinos: Es obligatorio que los vecinos de nuestra comunidad estén de acuerdo porque si no es así podremos enfrentarnos a una denuncia por su parte.
  3. Licencia municipal para cerrar una terraza: Si hemos cumplido con todos los trámites legales y tenemos el permiso por parte de los vecinos y el ayuntamiento, éste nos otorgará la licencia municipal y el proyecto se podrá poner en marcha. Se abonarán unas tasas que dependerán de cada municipio.

Cuándo prescribe el cerramiento de una terraza

Existen muchos casos en los que los propietarios de las terrazas se lanzan al cerramiento de su terraza sin tener el permiso ni la autorización de la comunidad de vecinos, y es aquí cuando surge la duda de cómo actuar.

En esta situación se convoca expresamente una junta de propietarios en la que se fija un plazo para que el propietario pueda demoler la obra. Si llega el plazo y esto no ha ocurrido, se procederá a demandar al usuario.

Cabe destacar que si pasa el tiempo y no se toma ninguna medida contra esta decisión, se convierte en un derecho adquirido y no se podrá hacer nada. La comunidad tiene un total de 5 años para oponerse al cerramiento de la terraza, que empiezan desde el momento en el que se realiza la obra.

También existen casos en los que se quiere dar el paso para legalizar el cerramiento y para ello existen una serie de requisitos.

En primer lugar, debemos tener en cuenta el tiempo que lleva hecho ese cerramiento. Si tiene menos de 10 años, debemos hacer un proyecto de legalización firmado por un técnico y solicitar la licencia de obra menor o mayor, según corresponda. Cuando obtengamos esta licencia, procederemos a pagar las tasas y los impuestos correspondientes. Finalmente, acudiremos al Registro de la Propiedad para dejar constancia de la modificación.

Si, por el contrario, el cerramiento tiene más de 10 años, no hace falta contar con la licencia de obras, pero sí con el proyecto de legalización y registrar la modificación.

Ventajas del acristalamiento para tu terraza

Muchos eligen esta opción por los beneficios que encuentran en ella:

  • No rompen con la estética del edificio y se integran a la perfección.
  • Son una gran protección frente a algunas situaciones meteorológicas.
  • Tiene una instalación rápida sin necesidad de una gran reforma.
  • Su apertura es fácil y cómoda.
  • Se adaptan a cualquier espacio.
  • Nos permite disfrutar de espacios durante todas las épocas del año.
  • Alarga la vida del espacio protegiendo su estructura.

Te interesa: Tipos de cerramientos para terrazas Un acristalamiento es una gran opción para ganar metros en casa y aprovechar ese rincón en cualquier día del año. Si tras leer este artículo quieres saber más sobre este tipo de proyectos y quieres saber cómo empezar a trabajar en tu terraza, escríbenos y resolveremos todas tus dudas.