Un buen aislamiento del hogar o la eficiencia energética en una vivienda no tiene cabida solamente durante el invierno. Invertir en tales conceptos son igualmente productivos durante el verano ¿o no sabías que también puedes soportar mejor el calor en una casa bien aislada? Las olas de calor que estamos sufriendo este verano, así como una generalizada subida de las temperaturas a causa del cambio climático, va a suponer que muchos de vosotros apostéis por la eficiencia en vuestra vivienda para poder sobrellevar mejor estas épocas. Y, además, también podréis ayudar a cuidar el planeta gracias a un consumo ajustado de energía en vuestros hogares.
Ahora bien, si estás leyendo este artículo es porque estás preocupado y te interesa el aislamiento de tu casa y cuáles son los materiales más adecuados para conseguirlo. Desde Dmasc Arquitectos te mostramos una selección de los materiales que te permitirán aislar de una mejor forma tu vivienda.
Índice de contenido
Materiales más adecuados para aislar a tu vivienda
Fibra de vidrio
Quizás este sea el material más económico y el más utilizado. La fibra de vidrio está hecha con filos de vidrio mezclados con material aislante. Las fibras son la parte que aísla del calor. Entre sus beneficios,se encuentra que estamos ante un material que no únicamente es aislante térmico, sino que también es un buen aislante eléctrico y acústico.Por lo que estarás aislando a tu casa de una manera integral. Igualmente, se trata de un material respetuoso con el medio ambiente -al no resultar tóxico- y duradero a largo plazo; ni se pudre ni se deteriora.
El único inconveniente que tiene se encuentra en su manipulación. Se trata de un material que puede causar daños en los ojos, la piel y los pulmones si no se manipula adecuadamente durante su instalación. Por lo que es muy importante dejar este trabajo en manos de los profesionales.
Celulosa
Este material aislante se caracteriza por su carácter ecológico. Se consigue a partir del cartón, el papel y otros materiales reciclables. Uno de los mitos acerca de este material es que, al componerse a partir de papel y derivados, no es adecuado en caso de incendio. No obstante, esto es falso. La celulosa es perfecta para reducir los daños causados por el fuego, gracias a que se trata de un material compacto donde el oxígeno no tiene huecos donde permanecer. El oxígeno es fundamental para la combustión del fuego, por lo que la celulosa favorece su extinción. Otra de sus ventajas es su precio y su alta efectividad como aislante, siendo uno de los materiales más usados para aislar casas.
Sin embargo, entre sus desventajas se encuentra que es un material poco recomendable para aquellas personas alérgicas al polvo y, además, conlleva una dificultad añadida en su manipulación, más complicada que en el caso de la fibra de vidrio.
Corcho
El corcho es un material 100% natural y ecológico, por ello sirve tanto para el aislamiento térmico como el acústico. Se consigue a partir del alcornoque, un árbol que muda su corteza cada 9 o 12 años. Por lo que estamos ante un material totalmente natural, que no genera residuos y que no tiene un impacto directo en la masa forestal. Entre sus ventajas, se trata de un material biodegradable, en el caso de convertirse en un residuo.
Además, si te decantas por este material a la hora de aislar tu vivienda, te supondría un ahorro de entre un 40% y un 60%, una cantidad nada despreciable económicamente hablando.
Poliestireno
Se trata de un material sintético que representa una de las mejores alternativas de aislamiento térmico gracias a sus fantásticas propiedades. Tolera los cambios de temperatura, es muy resistente a la alta compresión, se trata de un material duradero en el tiempo y es también resistente al agua, lo que evita la aparición de manchas originadas por la humedad. El poliestireno se presenta en dos opciones distintas, en las que difiere su coste: por una parte puedes encontrar el poliestireno expandido, es el más económico, y por la otra el poliestireno extruido, de un coste superior.
El único inconveniente radica en que se trata de un material altamente inflamable, por lo que para su instalación se debe aplicar una capa superior que lo proteja en caso de incendio en la vivienda.
Lana de roca
La lana de roca es, hoy en día, un producto que describe distintos materiales de aislamiento. Uno de ellos es un tipo de lana de vidrio fabricado con fibras de vidrio reciclado. El segundo tipo está hecho a partir de basalto. Y por último, puedes encontrar aquellos que se fabrican a partir de desechos de tubos de acero.
La lana de roca puede ser comprada en bloques o como material suelto. La mayoría no lleva aditivos que le hagan resistente al fuego, haciendo que no sea un material recomendado en situaciones de extremo calor, aunque no es combustible. Cuando lo utilices en combinación con otros materiales resistentes al fuego, la lana de roca es definitivamente un material aislante muy aconsejable para áreas muy grandes.
Espuma de poliuretano
A pesar de que no es el material de aislamiento más usado, si que hay que decir que es una excelente forma de aislar tu vivienda. Actualmente, la espuma de poliuretano no contiene gas de clorofluorocarbono (CFC) como agente interno. Esto ayuda a disminuir el daño causado por este gas en la capa de ozono. Es un material relativamente ligero. Hay espumas de baja densidad que pueden ser dirigidas a zonas donde no hay mucha necesidad de aislamiento. Otro de los beneficios de este tipo de material aislante es su resistencia al fuego.
Estos son algunos de los mejores materiales que puedes elegir en caso de querer aislar tu vivienda, pero existen otros muchos más, por lo que la lista es muy larga. Sea cual sea tu decisión, siempre debes confiar en los profesionales. Desde Dmasc Arquitectos, estamos a tu disposición para ayudarte en todo lo que necesites. ¡Contacta con nosotros!