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Cómo adaptar una vivienda para personas con movilidad reducida

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Seis de cada cien hogares españoles cuenta con personas de movilidad reducida entre sus habitantes. Estos datos, extraídos del Ministerio de Hacienda, han de convencernos de que las personas con movilidad reducida son una parte importante de población, con necesidades específicas en cuanto a la habitabilidad de viviendas.

En DmasC Arquitectos creemos que, aunque desde la Administración se hace todo lo posible para ayudar a este sector poblacional, las viviendas, por lo general, no están habilitadas para ello. Por eso mismo, hemos considerado oportuno crear este artículo sobre adaptar una vivienda para personas con movilidad reducida. Antes de que sigas leyendo, te informamos de que cada caso es único y varían en función de las necesidades de la persona, por lo que lo mejor es que te pongas en mano de un profesional.

Claves para adaptar una vivienda para personas con movilidad reducida

El BOE lo deja bien claro: a día de hoy, todos los edificios residenciales deben contar con acceso total para personas con movilidad reducida (o PMR). Sin embargo, es dentro de una vivienda donde la cosa se complica. Ya sea por no tener los espacios bien distribuidos o habilitados o por una incorrecta ubicación de muebles, la gran mayoría de viviendas no están adaptadas para PMR.

Eliminar las barreras de acceso

Este es, por lo general, el punto principal y el primer objetivo que se fija para mejorar. Si alguien con silla de ruedas no puede entrar en una casa, directamente no podrá vivir en ella. Por eso mismo, el Código Técnico de la Edificación hace que las puertas dejen un marco de 80 centímetros con una orientación de apertura de entre 120 y 150 centímetros, para que se pueda maniobrar correctamente.

También se recomienda que esos 80 centímetros sean la anchura justa del pasillo. Así, será la suficiente para que pueda pasar la silla, pero la justa para ubicar puntos de sujeción fácilmente agarrables.

El acceso mediante rampas o elevadores, por supuesto, es otro de los motivos principales por los que se opta para adaptar una vivienda para personas con movilidad reducida.

Reformas útiles y que den calidad de vida

No todo se trata de quitar barreras. La calidad de vida es esencial en cualquier vivienda. Por eso mismo, una recomendación clave y barata es la de instalar pomos bajos, que no sean redondos ni terminados en punta (para que no se enganche la ropa), todo con el objetivo de aumentar la facilidad de acceso.

Por otro lado, en cuanto a ventanas y puertas a exteriores (terrazas, cristaleras…), se deberían seguir las mismas recomendaciones para adaptar una vivienda a personas con movilidad reducida. Lo mismo ocurre con los enchufes, ya que cualquier cosa que se halle por encima del metro y medio sobre el suelo, supone un problema de alcance para una PMR.

Diseño y utilidad sí pueden ser compatibles

Como decíamos antes, la calidad de vida es fundamental en cualquier vivienda. Las PMR también necesitan de una casa acogedora y a la que llamen hogar. Por eso mismo, no es obligatorio que su vivienda tenga aspecto de sala de hospital. El diseño puede acompañar a cualquier casa, incluyendo a una de este tipo. Hay soluciones pensadas para todos los gustos y necesidades, por lo que no es algo que no se pueda compatibilizar con el pragmatismo que necesita una persona con movilidad reducida.

Diferentes estancias, misma necesidad

Como sabemos, para reformar una vivienda para personas con movilidad reducida hay que pensar en los distintos espacios que tenga una casa. En DmasC Arquitectos vamos a dar unas claves generales para que se pueda efectuar una reforma apropiada.

  • El baño es un espacio esencial que necesita una reforma medianamente amplia. Nosotros recomendamos que los mandos se ubiquen a una distancia adecuada, y que tengan un termostato para que el agua nunca supere los 50 grados de temperatura. Esto es para que, en caso de caídas, no se concurra también en quemaduras. También es relevante la presencia de un inodoro adaptado y anclado a la pared, con su respectiva barra, así como un lavabo con la parte de abajo libre, para que la silla de ruedas pueda entrar.
  • En la cocina, podemos pensar en una disposición en dos líneas, y que siempre esté todo a la altura de la PMR, para que pueda alcanzar cualquier utensilio o electrodoméstico.
  • En cuanto al dormitorio, lo recomendable es que la cama esté más o menos a la misma altura que la silla de ruedas, para que no se necesite de un gran impulso a la hora de pasar de un sitio a otro. Lo idóneo sería que el armario no presente ninguna barrera física por abajo o que sea empotrado, para que así la silla pueda moverse perfectamente.

Ayudas para habilitar una casa para personas con movilidad reducida

La Comunidad de Madrid ofrece ciertas ayudas en reformas cuyo presupuesto se sitúe sobre los 3.000 euros. Entre los requisitos generales para solicitar esta subvención, se encuentran:

  • No estar incluido en un ámbito de rehabilitación integrada.

  •  Que la vivienda tenga una antigüedad superior a los 15 años.

  • Tener una coherencia técnica con su estado de conservación.

  • Que las obras no se inicien antes de la obtención de la Calificación Provisional (salvo excepciones).

En cuanto a su solicitud, hay que hacerla a la Consejería de Transportes, Infraestructuras y Vivienda de la Comunidad de Madrid. Una vez presentada, en un plazo máximo de 6 meses, esta administración realizará el pago correspondiente, nunca superior al 25% del coste total, salvo excepciones. Sin embargo, sí existe la posibilidad de que se abone por adelantado la mitad de la subvención.