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Carpintería exterior en reformas integrales: ¿debería cambiar mis ventanas?
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Las reformas integrales en una propiedad son un proceso que implica una serie de decisiones que marcan la funcionalidad, estética y eficiencia energética de un hogar. 

Una de estas decisiones durante una reforma integral es la carpintería exterior, y en particular, las ventanas. Lo que nos lleva a una pregunta que ronda a todos los que inician este proceso: ¿debería cambiar mis ventanas? 

Desde DmasC Arquitectos hemos creado este artículo para analizar las diferentes razones que nos pueden llevar a decidirnos a cambiar las ventanas de una propiedad durante una reforma integral. 

6 motivos para cambiar las ventanas de una propiedad durante una reforma integral

Eficiencia energética

Uno de los motivos principales para considerar el cambio de ventanas durante una reforma integral es la eficiencia energética. 

Las ventanas antiguas pueden ser una fuente significativa de pérdida de calor en invierno y ganancia de calor en verano. Esto puede llevar a facturas de energía más altas y a un hogar menos cómodo. 

Te interesa: Aislamiento térmico y eficiencia energética en la construcción de una vivienda unifamiliar. ¿Qué se tiene en cuenta?

Al instalar nuevas ventajas con un buen aislamiento térmico, puedes reducir drásticamente la pérdida de energía y mejorar la eficiencia de tu hogar. Esto no solo te ayudará a ahorrar dinero a largo plazo, sino que también reducirá tu huella de carbono

Mayor comodidad

El confort en tu hogar es esencial. Las ventanas antiguas pueden permitir la entrada de corrientes de aire frío o ruido no deseado del exterior. 

Al reemplazarlas con ventanas de alta calidad, puedes disfrutar de un ambiente interior más cómodo y tranquilo. Además, las nuevas ventanas pueden tener características específicas para reducir la transferencia de calor, manteniendo la temperatura interior más constante y agradable.

Estética y valoración de la propiedad

La estética es una consideración importante en cualquier reforma integral. Las ventanas desgastadas o anticuadas pueden afectar negativamente la apariencia general de tu hogar. 

Al instalar nuevas ventanas, puedes darle un aspecto fresco y renovado a tu propiedad, lo que también puede aumentar su valor en el mercado inmobiliario. 

Por lo que, las ventanas de alta calidad pueden mejorar la fachada de tu casa y hacer que sea más atractiva tanto para ti como para posibles compradores futuros.

Mantenimiento reducido

Las ventanas antiguas pueden requerir un mantenimiento constante, como pintura y sellado para evitar fugas de aire o filtraciones de agua. Mientras que unas nuevas ventanas, especialmente las de PVC o aluminio, suelen requerir menos mantenimiento y son más resistentes a las circunstancias climatológicas y al paso del tiempo. Esto te ahorrará tiempo y dinero a largo plazo.

Cumplimiento de normativas

En muchas áreas, las normativas de construcción han evolucionado con el tiempo para incluir estándares más estrictos en cuanto a eficiencia energética y la seguridad

Cambiar las ventanas durante una reforma integral te permitirá asegurarte de cumplir con estas normativas y evitar posibles problemas legales o sanciones en el futuro.

Protección de los muebles y la decoración interior

La luz solar directa y los rayos UV pueden dañar tus muebles y decoración interior con el tiempo. Las nuevas ventanas a menudo incluyen vidrio con revestimientos especiales que bloquean estos rayos UV perjudiciales, lo que ayuda a proteger tus pertenencias y mantenerlas en mejores condiciones.

¿Qué tengo que tener en cuenta al cambiar las ventanas de mi propiedad?

Si estos motivos te han convencido de que cambiar las ventanas de tu hogar durante una reforma integral es una buena opción, ahora toma nota de los aspectos que debes tener en cuenta para hacerlos. Esto te permitirá tomar la mejor decisión y elegir las ventajas que se ajustan a lo que necesitas.

El tipo de vivienda

Antes de elegir las nuevas ventanas, es crucial considerar el tipo de vivienda según su construcción y ubicación. 

Si la propiedad se encuentra en una zona con cambios climáticos extremos, lo primero que debes tener en cuenta a la hora de elegir las ventajas es su aislamiento térmico. Si, además, es una zona húmeda, debes elegir materiales resistentes a la humedad para evitar su deterioro. 

Además, a todo esto hay que añadirle el estilo arquitectónico del inmueble. Asegúrate de que las ventanas elegidas se adapten a la estética de la vivienda.

La exposición al ruido

El aislamiento acústico que ciertas ventanas ofrecen puede marcar la diferencia a la hora de llevar una vida tranquila y cómoda en casa. 

Para ello existen materiales muy avanzados que hacen que cada espacio de tu hogar se convierta en un lugar tranquilo en el que desconectar. 

Tipo de ventana y material

El mercado ofrece una amplia variedad de tipos de ventanas, desde ventanas abatibles hasta correderas, oscilobatientes y fijas, entre otras. Cada tipo de ventana tiene sus propias ventajas y desventajas en términos de hermeticidad, ventilación y estilo. Debes considerar cuál se adapta mejor a tus necesidades específicas y a la estética de tu hogar.

Te interesa: 3 beneficios claves de los cierres como aislantes térmicos 

Además del tipo de ventana, también debes elegir el material adecuado. Algunos materiales comunes incluyen PVC, aluminio, madera y combinaciones de estos. Cada material tiene sus propias características en términos de durabilidad, aislamiento y mantenimiento. Asegúrate de seleccionar un material que se ajuste a tu presupuesto y requerimientos.

Presupuesto y financiación

El presupuesto y cómo financiarás el cambio de ventanas también es un factor crítico para dar el paso. El coste de las ventanas varía según el tipo, el material y la calidad. 

Tener un presupuesto claro y buscar opciones que se ajusten a él es el primer paso. También existen programas de ayuda a la mejora en materia de rehabilitación residencial y vivienda social que pueden ser una gran opción para hacer frente a esta inversión.

En definitiva, cambiar las ventanas durante una reforma integral es una inversión que puede mejorar significativamente la eficiencia energética, el confort, la seguridad y la estética de tu hogar. Si bien puede representar un coste inicial, los beneficios a largo plazo, como el ahorro de energía y el aumento del valor de la propiedad, hacen que valga la pena considerarlo. 

Además, con las ventanas actuales que existen en el mercado puedes disfrutar de un hogar más acogedor, lo que hace que la inversión sea aún más gratificante. 

Por lo tanto, la respuesta a la pregunta es clara: sí, deberías cambiar tus ventanas durante una reforma integral porque las ventajas que esto aporta a un inmueble merecen la pena.